Alerta por violencia machista en Cuba: tres feminicidios en solo diez días

Imagen "No más feminicidio".

Tres mujeres han perdido la vida de manera trágica en Cuba en lo que va de agosto, víctimas de violencia de género que ha dejado a sus familias y comunidades conmocionadas.

Tres mujeres han muerto por violencia de género en Cuba en la primera mitad de agosto, dos de ellas en la capital y una tercera en la provincia Holguín.

En la madrugada del 13 de agosto, en la calle Amistad número 360 del municipio Centro Habana, murió desangrada por una puñalada Ledisvannielis Acosta Echeverría. El perpetrador del crimen era su pareja.

“Estoy frente a ustedes pidiendo justicia. Mi niña no merecía que le hicieran eso, me la mataron a sangre fría dándole una puñalada por la espalda hasta que se desangró. No estoy pidiendo ayuda económica, solo que me ayuden a que, quien lo hizo, pague. Mi niña era tan joven, sólo 19 años”, dijo Paula Caridad Echeverría Pérez, madre de la víctima.

Ledisvannielis Acosta Echeverría

Ledisvannielis era natural de Bahía Honda, provincia de Artemisa, pero se había mudado a La Habana a la casa de Martínez, con quien mantenía una relación romántica.

El municipio artemiseño que vio crecer a la joven asistió a su entierro conmocionado por la tragedia de esta familia. La madre y los dos hermanos de la víctima hicieron llegar a Martí Noticias videos en los que claman que el culpable sea castigado sin piedad.

“Solamente quiero que le hagan justicia a mi hermanita. Ella no merecía morir de esa manera, era muy jovencita. Solo quiero que me ayuden para que ese hombre pague por todo lo que le hizo a mi hermana”, lamentó Ledisbania Acosta Echeverría.

De acuerdo con comentarios del barrio, después de cometer el crimen el atacante huyó, pero al caer la noche de ese mismo día se entregó a las autoridades alegando que había actuado bajo el efecto de las drogas.

Los vecinos señalaron a los familiares de la muchacha que el feminicida, antes había sido un maltratador.

“Quiero decirles a las mujeres que no aguanten más abusos de los hombres. La mujer que sienta que el marido la maltrata, por mucho que lo quiera, por mucho que lo ame, que lo abandone. El amor pasa, pero una perdida como esta no lo rebasa nadie”, indicó Eduardo Arzola, el hermano mayor de Ledisvannielis.

“Que el asesino de mi hermana pague, pero no que a los seis años ya esté en la calle, que pague como tiene que pagar, que la ley se le aplique con todo el rigor... Ese desgraciado como salga para la calle va a volver a hacer lo mismo. Lo que no quiero es que paguen más madres sufriendo por la muerte de una hija”.

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Feminicidios en Cuba: Familiares de las víctimas piden justicia

Previamente, en la tarde del 11 de agosto, Bárbara Elena Tejería Magdaleno, de 56 años, se dirigió a recobrar sus pertenencias a la casa de su pareja, en la comunidad Las Cañas en la periferia del reparto Calabazar del municipio habanero Boyeros. Nunca regresó a su hogar.

El atacanteestaba de pase de un correccional con internamiento donde cumplía condena y había mantenido una relación casual con la víctima por poco más de un año.

Tejería Magdaleno había comentado a su hermana que se sentía acosada, pero deseaba terminar la relación en buenos términos, señalaron vecinos en conversación con Martí Noticias.

Pero su presunto agresor pensaba diferente: Elena, como todos la llamaban, fue asesinada a machetazos, tres días después de su desaparición.

“Eso es lo que dicen por aquí. Yo la conocía, pero no era su amiga, así que no puedo afirmar nada”, recalcó Luisa María Cascorro, quien reside a pocas casas de la familia de la fallecida.

Cuando la policía fue a detener al sospechoso, se había ahorcado.

La noche del 5 de agosto, Milagros Batista Estévez, de 56 años, fue asesinada en su casa del reparto holguinero Alex Urquiola.

Según el testimonio de su hijo, Óscar Bermúdez, el presunto autor del crimen es expareja de la víctima, quien la agredía con frecuencia sin que ella se decidiera nunca a hacer una acusación formal.

Los crímenes ponen nuevamente en el candelero la preocupante violencia machista en Cuba y la falta de mecanismos eficientes para proteger a las mujeres.